Sabía que algo te ocurría, ayer por la mañana no me recibistes con tu habitual alegría, tardastes en reaccionar. Puede que estes harto de que todas las hojas del otoño caigan sobre tí y nunca te las quite, de que sólo te lave el agua de la lluvia, de que haya arena de tres veranos todavía en el maletero, una propaganda cogida con el parabrisas que nunca me acuerdo de quitar, gusanitos, papelitos y objetos varios esparcidos por detrás; de cargar con las bolsas del super, los atascos o mis momentos de soledad con mi música infernal a todo volumen. Al menos no te torturo con muñequitos, pegatinas o música regetona, sólo la medalla de la hermandad colgando del retrovisor con la banderita de Cuba , esa de la botella, y un pin de mi Betis clavado en un ladito del techo. Contigo he vivido muchos momentos, algunos muy dulces, y no te he valorado como te mereces. Te has estropeado cuando mas falta me haces y no sabes cómo te necesito.
Posiblemente el parte médico dicte que tu cura sea cara, aún así, prometo cuidarte, al menos por la cuenta que me trae.
A mi coche, con el deseo de que se recupere pronto, ahora sólo puedo pensar ¿Qué será de mí?.
Está claro que este 2008 ha empezado para mí muy "automovilistico". Como diría mi querido Sabina, "parecía como si me quisiera gastar el destino una broma macabra..."
ResponderEliminar“la medalla de la hermandad colgando del retrovisor con la banderita de Cuba, esa de la botella, y un pin de mi Betis clavado en un ladito del techo”..... esto está muy freaky Dama; Sevilla en estado puro, jajaja
ResponderEliminarBesos
Cuando algo comparte su vida con nosotros, cuando falta, cambia nuestra vida. Y sólo es una máquina, qué no haras con las personas que quieres.
ResponderEliminar1BESO.
A mi me han robado el coche 2 veces en mi vida. En las dos apareció posteriormente. He tenido dos accidentes también graves de los que gracias a Dios he resultado sin daños irreparables. Uno de ellos como sabéis en el mes de Diciembre y del cual todavía me estoy recuperando.
ResponderEliminarYo siempre llevo mi medalla de la Macarena en el retrovisor. No me la han robado y no le ha pasado nada en los accidentes.
En fin...ánimo querida Dama.
Mi C2 (que no el autobuús de tussam) está disponible cuando lo necesites; en granaina están las llaves.
ResponderEliminarQuerida Dama, a mí me pasa algo parecido. Tengo mi coche algo abandonado. No lo limpio desde hace meses y lo tengo algo, digamos desordenado. Pero si me faltara... estoy seguro que lo echaría mucho de menos.
ResponderEliminarEs antiguo, pero me lleva y me trae.
No te preocupes... verás como lo recuperas.
Un fuerte beso.
El coche siempre se estropea en el momento más inoportuno. Siempre es así, esto no es nuevo.
ResponderEliminarSi te coge además con la necesidad de utilizarlo a diario, pues la avería se nos convierte en un mundo.
No desesperes, querida Dama, y no por darte malos ánimos, pero no dudes que cuando algo se estropea parace que hay una epidemia. No te extrañe si ahora le pasa algo a la lavadora, al frigorifico o algún elemento similar.
Y de nuevo algo que si sucede aisladamente no fastidia tanto, en una situación como la tuya se te hará más cuesta arriba.
Mucho ánimo y adelante.
Mi coche a tu disposición, incluso si quieres con chofer.
Dama, un amigo mío en este tipo de situaciones dice: "Hay años que es mejor no levantarse".
ResponderEliminarEn fin, a tirar "palante" y sobre todo, espero que tu niño vaya mejor.
Un beso desde la calle Orfila.
Mi niño mejora, me tiene de criada total, todo el día a su servicio, incluso tengo que ir al Instituto semanalmente para recoger la tarea semanal que su tutora programa, y la casa llena de "coleguitas" por las tardes. Menos mal que es de carácter fuerte y siendo consciente de lo que le queda por delante no se ha venido abajo en ningún momento.
ResponderEliminarComo he pedido excedencia en el trabajo ahora estoy descubriendo una nueva faceta, la de ama de casa y no salgo de mi asombro con lo aburrida que es la vida de la mari que decide serlo voluntariamente, conversaciones aboslutamente inútiles en la puerta del colegio, cafelito, cotilleos varios, compras, casa, vuelta al colegio...
Menos mal que me suelo poner en la pared de frente a la puerta para que no me aborde ninguna "madre".
En cuanto a lo del chófer, querido Andréu, lo tendré en cuenta, gracias.
me alegro que tu hijo mejore. en cuanto a lo del coche, a todos nos pasa lo mismo. Siempre lo estamos usando, sin darle valor, y cuando más falta nos hace, ¡zas! nos deja tiradillos. Si es que tenemos que mimarlo...
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ResponderEliminarVaya tela chiquilla, menudo comienzo y para colmo me da por poner a Tejera, tus recuerdos brotan y te hacen llorar.
ResponderEliminarLo siento.
Intentaré compensarlo y se me está ocurriendo algo...
Y para rematarlo nos echan de la Copa...., jaja!!
ResponderEliminarEl último fin de semana de noviembre, mi hermano, se quedó sin luz en casa, saltaron los plomos y no era capaz de encenderlos, todo lo que había en el congelador...
ResponderEliminarSalió un momento a hablar con el administrador y cuando volvió a casa, las llaves estaban dentro. Y dentro también los libros que necesitaba para su siguiente exámen.
Como la familia estaba de viaje, sólo le quedó coger el coche, llevaba las llaves encima e irse a casa de un amigo. En el trayecto tuvo un accidente de coche. Afortunadamente salió ileso.
Me llamó al teléfono y le dije: Jesús, entra en la casa de Juan Ignacio y no salgas hasta el lunes. No se te ocurra salir de casa.
Como bien dices, las desgracias nunca vienen solas. A veces es mejor meterse 3 días en la cama para ver si amanece del todo.
Amigo Cabezota... increíble. No puedo decir otra cosa. Una detrás de otra.
ResponderEliminarEspero que esté bien y aprobase el examen.
Ánimo, Dama. Espero que tu hijo siga mejorando y resistiendo: ha heredado tu fuerza de voluntad.
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