Quisiera poder ilustrar esta entrada con la música de un fado, pero mejor dejarlo así, las imágenes ya de por sí, tienen la melodía de la nostalgia.
Vengo encantada, vengo llena de imágenes maravillosas y me he saturado de mar, bueno de rio, inmenso y maravilloso.
Todo es más claro y algunas respuestas se han venido en la maleta, con una botella de vino verde y el recuerdo de una ciudad absolutamente mágica.
Estoy absolutamente impresionada, de todos me he llevado una recomendación, Carrascus... ¡menuda tienda que encontré de vinilos antiguos!, Bogar: los pasteles de Belem, no tengo palabras, los fados, el vino verde, el bacalo dorado, el mar, bueno, el rio, contemplarlo largo rato, como me gusta hacerlo, las puestas de sol en sus mil y un mirador...
ResponderEliminarYa os contaré más.
Vengo completamente maravillada.
Como dicen los argentinos ¡qué bueno que viniste! Ya contarás de Lisboa. Y para mantener el encanto, te recomiendo que escuches al grupo Madredeus.
ResponderEliminarSeguiré tus recomendaciones cuando vaya.
ResponderEliminarBuena semblanza gráfica, como siempre.
Me alegro de encontrarte así. Al leer la entrada a mi, mas que un fado, se me vino a la mente ese tango…
ResponderEliminarPensé que habías estado viendo a Ami. Por cierto, me has recordado que hace tiempo ya, me regalaron un vino verde al que tendré que dar salida algún día…
Me alegro de tus respuestas.
Kisses
La verdad es que no sé que le encontrais al vino verde ése... pero bueno, para gustos, los colores.
ResponderEliminarAunque yo hubiese invertido la cantidad gastada en ese vino en algún vinilo más de esa tienda que encontraste.
Bienvenida, Dama de sevillano nombre. Espero que las respuestas sean acertadas.
Besos.
Lisboa merecía la visita de la Dama.
ResponderEliminarTus fotos me han traído recuerdos. Y ando tambaleándome como para aguantar ese soplo del atlántico.
Saludos.
Antonio
Sabes que? leyendo tus datos personales hubiera suscrito casi todo, lo único no llevo pulseras, llevaba una y se me rompió hace poco, por cierto ya que te han recomendado tanto y yo he llegado tan tarde a esta entrada, busca un fado de Dulce Pontes que se llama "lagrima" y oyelo releyendo esta entrada y viendo tus fotos.
ResponderEliminarUn beso.
Me alegro que hayas recargado bien las baterías. Seguro que ahora se ven las cosas de otra manera.
ResponderEliminarPor cierto, vaya barrio cutre donde te has metío, to viejo, esconchao y con un trolebus de la época del nodo. Casi igua que el metrocentro de aquí...
fdo.: sevillano y bético.
Lágrima, siempre, en la voz de Amalia Rodrigues, me van a disculpar ustedes...
ResponderEliminarParece que ha sido un viaje corto pero intenso. Me alegro mucho.
ResponderEliminarY gracias por las fotos.
No sabes lo que me alegra ver, que hayas disfrutado de tu viaje. Te lo mereces. Lisboa te estaba esperando...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
La foto en blanco y negro es buenísima, pero digo yo ¿la mujer del carrito por que no se sube al tranvía? Podría ser perfectamente tu madre o la mía, jeje
ResponderEliminarBonitas fotos... me alegra leer que has disfrutado.
ResponderEliminarPD. Que alegría me da ver que el amigo Canónigo está entre los que te leen.
Es alguien muy especial...
Muy bonita entrada Dama, aquello tiene que ser muy especial por lo que veo en las fotos, me alegra que hayas disfrutado, a buen seguro un fín de semanita por aquellos lares te ha sabido a poco.
ResponderEliminar¡Un saludasso!
Esta usted disculpada, es una canción preciosa, la interprete no es más que cuestión de gustos, me alegro de que fuera fructifero el viaje, yo encontré un cachito de mi en ese sitio.
ResponderEliminarbeso
Y yo.
ResponderEliminarExactamente es eso, encontré lo que buscaba, un cachito de mí, esas, posiblemente, fueran mis respuestas.
Gracias, canónigo.
¿No sono Madredeus en tu viaje...?
ResponderEliminarsaludos
Antonio
Querida Reyes, llego tarde, pero estoy pasando una rachita curiosa, entre falta de tiempo y achaques físicos, así pues, me alegra saber que las respuestas han sido encontradas.
ResponderEliminarUn fortísimo beso.
Claro que sonó Madredeus, y Misia.
ResponderEliminarAguaó, SIEMPRE estará usted disculpado por su tardanza y ánimo con esas curiosas rachitas que tan apurado le llevan.
Creo que os merecéis una canción.
Pues aquí anda una aún peor que el aguaó. Mira a qué horas llego a esta entrada..., mil disculpas.
ResponderEliminarTuviste mucha vista al elegir Lisboa para pensar, para disfrutar de lo añejo, para encontrarte, para volver con más sabor.
Ánimo con todo y enhorabuena.
Un saludo.
Empecé por el primero, me enganché con la Ponte y ahora he entrado en este.
ResponderEliminarMás que un vinho verde o rosé, te recomiendo un branco
"JOAO PIRES" MUITO FRIO
Ya me contarás cuando lo pruebes. Por cierto,no tiene nadaque ver com Maria Joao Pires la magnífica pianista.
Saludos
Doria
Que vivan las ciudades que conservan su encanto.
ResponderEliminarGracias por volver.
1BESO.
Sorprende la meláncolia y nostalgia que emergen de las imagenes. El tiempo detenido. tengo ganas d e ir. Un saludo, Dama.
ResponderEliminarTu viaje sólo ha servido para que emerja, parte de lo que atesoras en tu interior...
ResponderEliminarDama: sólo te faltaba una pizca de tiempo para poder reflexionar y exteriorizarlo.
Te sigo en silencio.