No pienses que estoy muy triste,
si no me ves sonreir.
Es símplemente despiste, maneras de vivir.
Me sorprendo del bullicio,
y ya no sé qué decir.
Cambio las cosas de sitio,
maneras de vivir.
Voy cruzando el calendario,
con igual velocidad,
subrayando en mi diario, muchas páginas.
Te busco y estás ausente, te quiero y no es para ti.
A lo mejor no es decente,
maneras de vivir.
Voy aprendiendo el oficio olvidando el porvenir,
me quejo sólo de vicio,
maneras de vivir.
No sé si estoy en lo cierto, lo cierto es que estoy aquí.
Otros por menos se han muerto,
maneras de vivir.
Descuélgate del estante y si te quieres venir, tengo una plaza vacante. Maneras de vivir
Superar los cuarenta quizás me haga ver las cosas desde otro prisma y regalarme momentos inesperados, como por ejemplo descubrir en la música de la tantas veces oída canción del mismo Rosendo, la definición exacta de como me siento cuando he pasado cuarenta y dos veces la hoja de julio de mi particular almanaque...
Es la primera vez que hago un comentario en su blog. Me trajo a él, hace algún tiempo el aroma a Triana. No sé si le aparecerá porque tengo problemas en la inserción de mensajes, pero bueno, ahí va. Ne ha encantado el texto, del ínclito Rosendo, pero aún más la foto. Se adivinan los setenta, días de feria, el seiscientos al fondo. Otro mundo, otra manera, otra vida. Yo me metería allí ahora mismo. Escribe usted poco en el blog, porque, como yo le tengo en el mío como uno de los blogs que sigo, me aparece el primero cuando usted mete algo. Hoy lo he recibido con ilusión, y me ha alegrado las pajarillas. Un admirador, José Luis Tirado. Saludos. Y ponga usted música de Triana, con todos los respetos para Rosendo
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarQuerido Jose Luis, bienvenido a esta ya su casa. Triana, en su honor, ha desbancado al de Carabanche. Tiene usted razón, y además, cumplir años merecen ser ilustrados por la música de mi vida.
ResponderEliminarEscribo poco porque llevo varios frentes abiertos, pero no dejo de preguntarme cuándo volveré a recuperar el hilo que me llevó a conocer la verdadera esencia de esta Sevilla que tanto busco.
Un placer y por favor, vuelva a menudo. Prometo volver yo también.
Y por cierto, la foto es de una calle del polígono de San Pablo en 1976. Ojalá pudiesemos volver atrás, posiblemente me haría la misma ilusión irme a la feria ahora como cuando lo hacía en el 127 de mi padre con el traje de flamenca que mi madre nos ponía a mi hermana y a mi sobre los jerseys de cuello vuelto... ¡madres!
ResponderEliminarQué foto más graciosa! debe de ser muy entrañable...
ResponderEliminarPor cierto uno que fue (y supongo lo seguiré siendo) "leñero" he leído la canción desde otro prisma que me ha sorprendido. 'sorpresa!
¿Cuántas veces habré cantando esta canción? Hacíamos una versión, teníamos un grupito los colegas: "Los huevos a la flamenca". Ay, tiempos!!!!
ResponderEliminarUn beso, mi querida Dama.
pienso que los años nos hacen mejores seres humanos, todo depende de nosotros y nuestra actitud hacia la vida.
ResponderEliminarRegresas con fuerza... creo que es una entrada de las que dicen "aquí estoy mundo".
ResponderEliminarBellas letras
Antonio
P.D. ayer estuve con tu vecino, de corraleras por Triana...