Cuando digo maestros refiriendome a Mortadelo y Filemón lo digo completamente convencida. Me explico.
Me aficioné a la lectura desde niña por culpa de ellos; si me gusta escribir, también ellos tienen algo que ver, y por supuesto, mi gran vocación y afición, el dibujo, tan sólo es por ellos dos.
Y me reñían porque leía muchos tebeos y no estudiaba...
Yo soy un caso raro, siempre fui más de Zipi y Zape, aunque también leía a Mortadelo y Filemón.
ResponderEliminarComparto contigo y supongo que con otra mucha gente, esa iniciación a la lectura a través de estos personajes de los tebeos, aún conservo varios "Superhumor" en mi biblioteca.
Me adhiero a este homenaje ya que, como bien dices, nos enseñaron a leer y por tanto a escribir, dos de mis mayores aficiones.
Dama, dama. Me ha gustado este escueto homenaje, tan sencillo y verdadero, alejado de la pretendida erudición de quienes aseguran que antes de gatear ya habían leido a Kundera o a Sartre, por un poner... Yo, como Pregonero, fui más de Zipi y Zape, pero sobre todo de Mafalda, en unos libritos apaisados de Lumen. ¡Qué flashback!
ResponderEliminarCuando éramos niños de colegio, mis amigos del barrio y yo, íbamos a la ya extinta biblioteca pública de la calle Alfonso XII todos los sábados y allí pasábamos la mañana leyendo tebeos, yo leí allí todo lo de Astérix, Tintín y, por supuesto, de Mortadelo y Filemón; luego, mis compañeros pasaron a leer comics (tebeos en "americano") de superhéroes del estilo de Spiderman o el Capitán América, mientras que yo me decantaba por libros de nuestra Semana Santa. ¡Qué momentos aquellos!
ResponderEliminarYo me inicié con un tebeo más infantil "Pumbi", entonces eran semanales y me lo compraban en un puesto de tablas verdes, como eran antes los puestos, todavía existe aunque "estilo NODO" en la esquina de Felipe II con Bogotá. Después, como Pregonero, siempre fui más de Zipi y Zape. Esos sí, un recuerdo fantástico es de mis veranos cuando me compraban en un puesto de la plaza (mercado de abastos) de Rota números antiguos del TBO.
ResponderEliminarLa máquina del cambiazo, Chapeau el esmirriau, la caja de las siete llaves, el caso del bacalao, el gang del chicharrón... los compré desde que costaban 45 pts hasta que costaron 75 pts... colección OLÉ auténtica que todavía conservo.
ResponderEliminarQuién me mandará meterme en blogs de política, con lo a gusto que se está aquí.
yo también conservo mis tebeos y mi colección olé, tengo uno que es mi favorito, "operación bomba" donde sale Mortadelo vestido de flamenco gritando: ¡viva er beti manquepierda! frente a una peña sevillista...
ResponderEliminarAuténtico
La verdad es que Mortadelo con esa cara no podía ser de otro equipo :-P.
ResponderEliminarhabrá que ver la tuya, ...
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