En el bar donde todos los días desayuno, al volver de la ausencia capillera y escolar, me he encontrado con una sorpresa, en cada sobre de azúcar se lee un pensamiento, el de ayer, de origen anónimo, no me hizo ningún efecto, pero el de hoy, la verdad es que me ha dejado pensativa.
"Es feliz el que soñando, muere. Desgraciado el que muere sin soñar"
Rosalía de Castro tenía toda la razón, aunque el camarero parece que me lo haya colocado a posta
Que encanto lo del azúcar… En fin, de hecho enlaza con aquello de que esta semana fue un sueño, nuestro sueño y… volveremos a poderlo soñar.
ResponderEliminarKisses
El sobre de azúcar con más gracia lo vi en el Bar Goma, que está frente al Cementerio de San Fernando. Decía así:
ResponderEliminar"BAR GOMA
Aquí se está mejor que allí"
Humor negro por los cuatro costados. Creo que ya dejaron de usar esos sobres.
Yo guardo uno de recuerdo.
Muy bueno el azucar del bar Goma. Y enlazando con la dama...¿Como se vive sin soñar? Aquel que no sueñe desdichado es.
ResponderEliminarA mi me parece impensable que haya personas que no sueñen. Creo que es algo innato en la persona, aunque desde luego, estoy totalmente de acuerdo con Rosalía: desgraciado el que no sueña.
ResponderEliminarUn abrazo
A veces, algún duende viene a nuestro encuentro y nos pone, por ejemplo, un azucarillo frente a nuestra cara.
ResponderEliminar¿ Es un mensaje ?.
Quizás.
Hay que soñar, dormido o despierto.
Un beso.
Ah,la foto parece de Lanzarote.
ResponderEliminarDicen que dormir
ResponderEliminares morir por un tiempo,
puede que sea cierto
siempre que se duerma
y no se tengan sueños.
Buen pensamiento, me hace recordar a mi.
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