Ayer me crucé con Paco Correal por la Alameda. Me acerqué a él, aún me estoy preguntando cómo fui capaz de hacerlo, sin dudarlo, pese a que hablaba con una persona. Le pregunté, aún sabiendo de sobra la respuesta, "Perdone, ¿es usted Correal? a lo que contestó afirmativamente. Le dí la mano y le dije que era un placer saludarle, que me encantaba como escribía. Él, amable y educadamente, me dio las gracias, incluso diría que algo sorprendido. Cuando seguí mi camino me iba arrepentiendo a cada paso que daba, ¡Cómo pude no decirle que cada vez que leo su artículo en Diario de Sevilla, le mandaría un email ipso facto diciéndole lo bien que escribe!, ¡cómo pude olvidar agradecerle su maravillosa biografía de Gordillo!, ¡cómo pudo olvidarseme su maravilloso relato en verdiblanco! y que también tengo un hijo que nació entre unos y ceros ¿cómo pudo sentirse sorprendido si escribe de maravilla?
Pues Sr. Correal, si lee por casualidad este blog, que sepa que yo, la de la bici que le abordó en plena calle mientras usted charlaba con un amigo tranquilamente, pensaba decirle alguna vez si tuviera oportunidad de conocerle, todas las cosas que le digo arriba y que después, no me atreví, que no es nada más que me encanta como escribe, que al fin y al cabo, es lo que le dije.
Buenísmas las historias sevillanas y veraniegas que nos ha estado contando estas vacaciones cada día en Diario de Sevilla, la que hablaba del Corte Inglés y su 4.40, genial
ResponderEliminarLa verdad es que tiene un estilo muy bueno y con la gran capacidad de enganchar al lector.
ResponderEliminarNo se preocupe vos, querida Dama, que maese Correal sabría leer el resto del mensaje en su gratitud sutil.
Besos atados en un doble cordel verdiblanco.
Tiene un estilo único. Sus crónicas en cada una de las líneas de autobuses son geniales.
ResponderEliminarAntonio
Es que Paquiño es un crack...
ResponderEliminarAunque no reconocido lo que debiera, recuerdo que cuando un escritor muy querido por usted me lo presentó lo hizo diciéndome que era el gran cronista de la ciudad. Creo que así se define. Un saludo dama.
ResponderEliminarBuen tío Correal
ResponderEliminarEs difícil decir todo lo que uno quisiera en ese breve espacio de tiempo.
ResponderEliminarDesde mi retiro...
fdo.: sevillano y bético.
Hace unos meses tuve la suerte de hacer prácticas durante dos meses en Diario de Sevilla. Entre los muchos buenos recuerdos que guardo de aquel breve espacio temporal está el de haber conocido a un tipo como Paquiño.
ResponderEliminarEn cuanto a su forma de escribir, que duda cabe que está llena de personalidad. Debe ser todo un lujo escribir con esa clase y esa libertad.
Gran libro El rayo verde.
ResponderEliminarQuizás yo también me hubiera quedado cortado ante esa situación.
ResponderEliminarCoincido contigo en que es una de las mejores plumas de Sevilla, me atrevería a decir que la más lúcida, ácida, real y original de cuantas he leído.
Un beso y ya queda menos.
Algo así me paso cuando en la inuaguración del pasado Festival de cine de Sevilla me encontré de sopetón con una actriz danesa que actuó en la peli Los idiotas de mi admirado Lars von Trier.
ResponderEliminarCuando reaccioné y junté el valor suficiente para hablar con ella, ya no la pude encontrar.