miércoles, 20 de octubre de 2010

Bien merece la pena

Por un café con complicidad literaria, bien merece la pena aguantar el achuchón aprovechado de mi ex camarero italiano favorito; por un ejemplar de "Pedro Páramo" bien merece la pena distinguir esa frágil frontera que delimita lo real de lo irreal; por una pluma que no pintaba, y que tras haberla sometido a un proceso de desmontaje y engrasado, podrá firmar autógrafos, ya lo verás, bien merece la pena llevarme en la rebeca todos los caliches de la pared de la cafetería, pero por una tableta de chocolate de Bariloche, Patagonia, 70% cacao que ya, a estas alturas, agoniza en su caja, bien merece la pena cambiar de identidad ante una llamada de teléfono y bautizarme como Fernando, porque ya lo dijo Don Mario Benedetti...

Gracias, Humphrey.



4 comentarios:

  1. Nunca olvides lo que dicen, si hay algo más peligroso que un italiano, eso es un argentino…
    Mmmmmmmmmmmm
    A todo esto, la segunda persona que habla de Pedro Páramo en menos de una semana, curioso…

    Kisses

    ResponderEliminar
  2. hacía mucho que no te visitaba pero al poner en orden mi blog encontré el enlace que te puse hace mucho tiempo!!!
    Saludos

    ResponderEliminar
  3. Estimado amigo:

    Te ruego disculpes este spam sobre mi nuevo blog de viñetas http://andalucia-tercer-mundo.blogspot.com.

    Gracias y un saludo.

    Ropo.

    ResponderEliminar
  4. Po leer tu blog, bien merece la pena dejar que el café se enfrie en la cocina. Merece la pena, de verdad.
    Un saludo.

    ResponderEliminar