miércoles, 11 de diciembre de 2013

Elvira y los puntos suspensivos


Llevo toda la tarde acordándome de Cecilia, la camarera de la magistral película de Woody Allen, "La rosa púrpura del Cairo" quien de tanto soñar con las historias que veía en el cine, al cual recurría para ahogar su tristeza, acabó metiendose dentro de la pantalla y convirtiéndose en el personaje que ella misma habría querido ser, y que fue de tanto soñarlo.
Y yo, que sueño como ella, y que escribo para ser feliz y ser yo misma, y ser libre creando vidas artificiales, llevo todo el día de hoy, un diez de diciembre que podría haber sido once, entrando y saliendo de la pantalla blanca del papel donde reside la silueta de un personaje que yo misma construí a base de palabras sin darme cuenta de que se acabaría convirtiendo en realidad como una carambola del destino. Una maravillosa carambola.
Y separada de mi misma, casi en las nubes, perpleja, (qué palabra más llena de puntos suspensivos), y sobre todo, presa de la sorpresa, no dejo de pensar en todos los pasos que ella recorrió y que yo estoy siguiendo justo detrás de mi propia letra escrita.
Los rincones, los lugares, los sonidos, los momentos, las miradas, las pasiones secretas, las canciones, las frases, todo en ella me está persiguiendo como una Alicia en su propio pais de las maravillas.
Escribí una historia que residía en los entresijos de mi imaginación alimentada por una íntima tristeza, y ha acabado apoderándose de la autora liberándola al mismo tiempo de cualquier atisbo de melancolía, la cual, ahora mismo, escribiendo esta entrada, solo busca mentalmente el río de aquella canción de Bruce Springteen para bañarse desnuda y después, tirada en la orilla, preguntarse si un sueño es una mentira si no llega a hacerse realidad o es algo peor, y así, esperar a que alguna vez en su vida, en algunas de las vidas futuras, pueda acompañarla fuera de su irrealidad literaria , y abrazarle siempre a la orilla de ese rio imaginario y musical, a ese hombre invisible que quizás, ya no sea tan invisible.
Y ya es día once. Perfecto.

1 comentario:

  1. Y si al final resulta que estaba equivocado......
    http://trianatrinidad.blogspot.com.es/2011/05/buscando-sinatra-desesperadamente.html

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